Blogia
Tonicruz

El ego totalitario

Leyendo un libro de Rojas Marcos sobre la Autoestima encuentro que un señor llamado Anthony Greenwald, profesor de psicología estadounidense, describió hace dos décadas el "ego totalitario". Según su teoría muchas personas, con tal de defender su autoestima, distorsionan los hechos, se absuelven de sus responsabilidades y hasta mantienen una estricta censura para no cuestionar sus acciones. Ilustraba su explicación citando frases tan antológicas (y tan relativamente comunes en los atestados de compañías de seguros) como "el arbol se echó encima de mi coche".

En España nadie es responsable de nada. Si uno no tiene trabajo es por la crisis. Si lo tiene y lo hace mal, es por el jefe. Si se es jefe y la empresa marcha mal, la culpa la tienen los empleados. ¿Cuántas veces hemos delegado la responsabilidad suprema en los otros para lavarnos las manos como Pilatos?

Trabajo en el periodismo deportivo y en ese mundo de tópicos -"el fútbol es así, no hay rival pequeño, el objetivo es marcar un gol más que el contrario"- me fascina particularmente el empleo del plural colectivo. Nadie hace nada mal. Es muy difícil escuchar a un futbolista reconocer que no jugó bien un encuentro. Como es igualmente extraño que un entrenador explique concienzudamente los motivos de una sustitución a todas luces errónea. Pero, sin duda, lo más raro de encontrar es a un presidente que admita su torpeza en una contratación o en toda una gestión.

El fútbol no es más que un reflejo más de la sociedad. Por eso, y aquí quiero llegar, cuanto más alto es el cargo menos sencillo es la autocrítica y más totalitario es el ego. ¿Se imaginan a González disculpándose por lo del Gal? ¿A Aznar haciéndolo por lo de Irak? ¿A Zapatero por...bueno, por todo esto?

Es la paradoja de vivir en España. Un país gobernado por la complacencia. Por las comilonas a costa de la empresa y los salarios a costa del Estado.

A mi me da igual, con que haya otro a quien echarle las culpas... 

0 comentarios